Hoy vamos a echar un vistazo al juego Jotun: Valhalla Edition. Este es un juego que he pensado durante bastante tiempo parecía interesante, pero de alguna manera nunca le di al botón de compra, pero me alegro de que finalmente lo hice, y te diré por qué.
El juego se desarrolla dentro de la mitología nórdica. En él encarnas a la guerrera vikinga Thora, que tuvo una muerte ignominiosa y debe demostrar su valía a los dioses para poder entrar en el Valhalla.
Viajas por los diferentes reinos para resolver puzles, recoger manzanas y visitar los santuarios para ser bendecido por los dioses. Esto te hará más fuerte y te ayudará a superar el siguiente gran desafío que te depare el juego.
Los encuentros son caricaturescos sin ser demasiado ridículos, y de hecho me recordaron a algunos de los juegos de la vieja escuela de los años noventa. Derrotar a los jefes puede requerir un poco de práctica, pero una vez aprendidos sus movimientos es bastante fácil.
Mi mayor problema con Jotun: Valhalla Edition es que es demasiado corto, y un jugador medio puede pasárselo en 4 o 5 horas, pero sigo pensando que merece la pena comprarlo cuando está en oferta. Por supuesto, podría optar por volver a jugarlo en el modo Valhalla, que se desbloquea una vez derrotas al último jefe, pero decido no hacerlo porque lo que disfruté fue el viaje, y eso no se enriquecería simplemente subiendo la dificultad.
Me gustaría que hubiera más cosas que explorar en el juego, y me gustaría ver una secuela u otro juego como este en el que profundizaran más en la historia y crearan otra aventura única para los amantes de los videojuegos y la cultura nórdica.
También me pareció genial que el juego estuviera en islandés, con subtítulos en inglés, añadía un toque de autenticidad a la experiencia. Aunque hay que tener en cuenta que los vikingos no hablaban islandés, sino nórdico antiguo. Sin embargo, el islandés es el idioma moderno más cercano que tenemos hoy en día.
Hay algunas cosas que me molestaron, por ejemplo, me hubiera gustado ver a Thora usando ropa vikinga históricamente correcta, y vamos, qué pasa con esa doble hacha, sólo dale un hacha danesa o una lanza, todavía se habría visto bien. Realmente no hay necesidad de exagerar haciéndola arrastrar un hacha doble gigante detrás de ella.
Recomendaría este juego a cualquiera que ame la cultura nórdica, los puzles, la narrativa y los jefes desafiantes. Las bellas ilustraciones y la música agradable y relajante también fueron un gran punto a mi favor.